Sergio Fernández
Salvador
Lo breve eterno
Sergio Fernández Salvador es un poeta con denominación de
origen. Nacido en León, los paisajes y el vocabulario de una infancia rural en
tierras leonesas llenan sus versos. Es además un poeta paradójico: a la vez muy
directamente autobiográfico –o esa impresión da– y muy dependiente de unos
pocos maestros.
Su poética
la expresa en el poema inicial (y luego la reitera en otros): “decir como nunca
lo de siempre”, “cifrar lo que importa en lo que pasa”, eternizar el instante.
Para ello recurre a una tradición que tiene en Eloy Sánchez Rosillo y en Miguel
d’Ors a dos de sus poetas más cercanos. A Sánchez Rosillo remiten muchos de sus
incursiones en la metapoesía. “¿Y morirás, otoño, / sin tener tu poema?”,
comienza “Justicia poética”, cuyos versos finales dice: “Por eso y más te
canto, otoño amigo, / antes que a tu dorado pergamino / se superponga el mudo
palimpsesto / de la página en blanco del invierno”. Miguel d’Ors está detrás de
la ingeniosa estructura de poemas como “Enmienda”: todo lo que no fue se hace
verdad en el poema.
La estética
es la misma que manifestaba en su primer libro, Quietud, publicado también en La Isla de Siltolá y toda una sorpresa incluso para
los lectores más atentos a los nuevos nombres.
El poeta –dedicado
profesionalmente a la música, muy al margen de la vida literaria– es consciente
de las críticas que se pueden hacer a su manera de entender la poesía, del
calificativo de epigonal y pasadista y que algunos le aplicarán, y responde a
esos reproches en el poema “Vieja y nueva”. Su intención es escribir “nuevos
poemas de lo eterno humano, / renovación constante de lo mismo”. Y lo consigue en
tantos poemas memorables, viejos y nuevos, herederos de Antonio Machado y de Juan
Ramón y de lo mejor de la tradición elegíaca española, pero con un matiz distinto
y absolutamente personal. Algunos ejemplos (podríamos citar otros muchos): “A una hoja”, “A una piedra en la playa”,
“Cerca del cielo”.
Cierto que
también a veces se nos muestra un tanto despeinado y rústico, como si a los
poemas les hubiera faltado un último pulimento que eliminara algunas caídas
rítmicas (y quizá habría hecho falta una criba más exigente en la sección de
haikus y adivinanzas). Pero, aunque a veces nos distraigan en la lectura,
cuando cerramos el libro importan poco esas limitaciones. Incluso pueden llegar
a formar parte del encanto de este poeta –uno de esos descubrimientos que
justifican a una editorial–, un poeta que sabe sentir y sabe decir, que nos
habla de árboles y montes, de mariposas y escarabajos, del amor y la infancia,
del tiempo que pasa y que, gracias al poema, no acaba nunca de pasar.
Sergio
Fernández Salvador
¿Y qué ambición más limpia,
mejor dotado premio que merecer cantarte,
cenizoso abedul que entre dos prisas
te cruzas en mi día?
¿No es suficiente pago el rumoroso
tintineo de las monedas de oro
que aún tiemblan en tus ramas
cuando están ya desnudos
los castaños, los álamos, los plátanos?
Se para uno a mirarte y ya le habla
del alma herida al alma tu tronco acuchillado,
la mirada espantada de tus ojos,
pero a la vez le cantas –si a escuchar acertamos–
la melodía única
que brota de los surcos de tu blanca
corteza, tal de rollo de pianola.
¿Cómo no devolver canto con canto?
Cuando otros enmudecen esperando
la tarda primavera, tú creces hacia el frío,
y es clamor tu silencio y es abrigo
la lividez estoica de tus ramas,
la dignidad sufrida de tu invierno.
Tomáramos ejemplo de tu ejemplo
ante los fríos aires de la vida.
Ansiando leer el nuevo libro de S.F.S.,este poema regenera nuestra savia que falta hace.Gracias.
ResponderEliminarSr. García Martín, lo que tiene que hacer es reunir a este, a los beades y a todos los beatos hijos de miguel d'ors, en un seminario y luego hacer con ellos algo parecido a "los chicos del coro"... cuánta superficialidad, qué falta de hondura, qué repetición de tópicos sin añadir más que un poco de música tan sabida ya que aburre ya a lo lejos... Esto es a la poesía como las gominolas a la repostería: chucherías para lectores infantilizados!
ResponderEliminarMarinerito
Qué cosas hay que oír, señor López-Vega, qué cosas.
ResponderEliminarJLGM
Don García, la cursilería le nubla el punto de mira. Aunque sea Cereijo todo lo que reluce, no es Lopez Vega todo lo que desluce... Siga probando, quién sabe; a lo mejor acierta. Mira que si soy, oh ultratumba, Muñoz Rojas...
EliminarMarinerito
El Sr. López-Vega es capaz de lo mejor y de lo peor.
ResponderEliminarDe lo peor, esto:
Hay ciudades compartidas y rincones
solo de los dos, pocos, es cierto, pero ahí están,
y luego está tu forma de darle vuelta a todas las cosas,
sin olvidar tu manera de chupármela
como una muñequita manga
ni tu comprensión de todas mis incomprensiones”.
De lo mejor, esto otro:
Mi abuelo,
que lo sabía todo del mundo,
que podía agarrar un relámpago de trucha con la mano,
que sabía silbar en lenguas para atraer a los jilgueros,
que conocía las horas en que se podía atravesar el túnel
sin peligro de encontrarse con un tren de frente,
que sabía cuándo envidar y cuándo callar,
mi abuelo que tumbó a un irlandés de dos metros
a coñacs, que se salvó de un tren que cayó al río,
mi abuelo que asaba las mejores castañas del mundo,
mi abuelo que me llevaba de la mano
a descubrir la tierra,
mi abuelo
confunde el día con la noche, duerme si hay sol
y en cuanto oscurece entra en una vigilia enloquecida,
abre puertas, enciende luces, despierta, grita,
y yo, acostumbrado a aprender de él,
me niego a creer que sea verdad
que ha perdido la cabeza,
y paso las noches abriendo puertas,
encendiendo luces, buscando desesperado
en todo esto una lección postrera
aterrado no sé
si por no encontrarla, o por entenderla.
Cuando alguien es de Bilbao lo primero que piensas es que es un buen cocinero ( un chef en potencia , incluso ) , creo firmemente en las denominaciones de origen ( el sello del producto , supongo ) .
ResponderEliminarJuan de Mairena : Pero , además, ¿ pensáis que un hombre no pueda llevar dentro más de un poeta ? lo difícil seria lo contrario , que no llevase más de uno .
Después de la verdad nada hay tan bello como la ficción , dijo Abel Martin .
Respuesta al anónimo "marinerito": Prefiero probar otras cosas, don Lope; un helado de melón, por ejemplo, que ya hasta en Asturias comienza a hacer calor.
ResponderEliminarJLGM
Por alusiones: me veo yo, de veras, poco reluciente. Cuando alguien hace algún comentario poco grato sobre mi persona o mi trabajo, me es fácil consolarme pensando: "si supieran lo que acerca de mí pienso yo...".
ResponderEliminarJosé Cereijo
Y probablemente ambos estéis equivocados, amigo Cereijo.
ResponderEliminarJLGM
Quién sabe. Yo recordaba, al decirlo, unas palabras que leí en el blog de Enrique García-Máiquez. Cita un breve poema de Mario Quintana: "Cuando alguien te calumnie, / sonríe con tranquilidad./ Sabes de sobra que peor sería / si alguien contase la verdad". Y añade: "Y más todavía, si usted se atreve. La mirada de vuelta de Gómez Dávila: "A cierto nivel profundo toda acusación que nos hagan acierta". Yo tiendo a pensar algo que, si no es exactamente eso (demasiado generalizador y tajante, a mi ver), al menos se le parece bastante.
ResponderEliminarJC
Quien usa la palabra cursi es un/a troll , cualquier tonto por el hecho de insultar no puede tener razón . suelen darse juicios estrafalarios de forma cobarde y pueril , Probidad es lo que falta a todos los niveles
ResponderEliminarEn Internet se hacen muchas trampas por parte de los " escritores" que usan la censura a su gusto , figuras no hay y donde hay dinero hay interéses polivalentes . Estoy leyendo a Chaves Nogales y Bolaños por primera vez) y tengo claro que no hay ningún escritor vivo a este nivel . Me han gustado los Haikus y estrofas que acabo de leer de Cereijo ( no será un/a Wislawa o un Corso pero es muy bueno ) , ya me gustaría a mi escribir la mitad de bien
Saludos.
Mil gracias. Uno no es "muy bueno", ya quisiera: es sólo un aprendiz. Pero, como dice más abajo M. L-V., "es un error muy de agradecer".
EliminarJ. C.
Qué déjà vu, por Dios. Y hablando de Dios, somos como la Santísima Trinidad:
ResponderEliminara) el que creo que soy,
b) el que creen que soy y
c) el que soy.
Me quito el cráneo, que diría Ramón María. Pero vamos, que lo sabe hasta el Tato, gran amigo de Rajoy, y lo que pasa es que somos pocos y nos conocemos mucho.
Meu caro JLGM,
ResponderEliminaryo si tengo algo que decir, lo firmo. Y este libro no lo he catado aún. Y admiro a d'Ors como el que más. Todo lo demás... ¡cosas que pasan por dejar pasar a gente encapuchada! Por cierto, como se parece la opinión de tu primo de zumosol a la tuya. No será que eres tú, ¿no? Aplicando tu poco educada técnica, así sería... (Gracias, por cierto. Todos somos capaces de lo peor, pero que haya alguien que piense que también somos capaces de lo mejor es un error muy de agradecer...)
Abrazo
M. L-V.
No siempre, no siempre, amigo M. L-V.
ResponderEliminarA ver cuándo vienes por Asturias, antes de hacer las Américas, y seguimos charlando.
JLGM
zUmO dE pOeSíA no cuenta, entre sus militantes, con el egregio Sr. García Martín. Ya nos gustaría, pero no. Somos un grupo de aficionados a la poesía que nos reunimos, generalmente en una cafetería de Granada, los sábados a las 17 horas. Quien quiera venir será bien recibido. Visitamos diariamente muchos blogs y webs para seleccionar poemas y finalmente sólo publicamos uno al día. Esperamos que al señor M. L-V santa Lucía le mejore la visión identificadora o, cuando menos, no se la disminuya. Y como vuelva a aludir a Zumosol avisaremos a nuestro primo (el de Zumosol) y se enterará de lo que vale un peine. Avisao queda.
ResponderEliminarCuando Marquez adelantó a Lorenzo en Jerez , este le acusó de ponerle en riesgo y le quiso denunciar . Marquez le respondió : ¡ Le gustó a la afición ¡ y Lorenzo se calló para siempre el tema . Un escritor debe ser humilde y respetar las opiniones de los aficionados , cuando debates en Internet tienes que ser sutil pero sin caer en banalidades que hagan dudar de tu cultura y tu benevolencia. La afición es soberana cuando se trata de valorar los hechos de un profesional , aunque este equivocada.
ResponderEliminarAsí soy yo , ¿ Que soy yo ?
igual que tu , inquilino del mundo , inquilino.
no te lo tomes para mal , ni para bien
ni lo dudes , lo quieras o no lo quieras ,
eres inquilino .
De Diego Carrasco , cantaor y poeta gitano.
¡ Viva Granada y los poetas españoles ¡
¡¡Jo, que ilusión, que me utilicen en un troleo! Acabo de ver esto, remitido por Enrique García-Máiquez, y su reseña sobre Eder, y veo con placer que el anónimo nos llama -al menos a SFS y a mí, no sé a quién más- ¡"gominolas"! Sólo puedo decir: gracias. (Insértese aquí un guiño pícaro).
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