sábado, 13 de mayo de 2017

Cara y cruz del aforismo


Verdad y media.
Antología de aforismos españoles del siglo XXI (2001-2016)
Selección de León Molina
La Isla de Siltolá. Sevilla, 2017.

 El aforismo es un género que se ha puesto de moda. Hay quien lo atribuye al auge de las redes sociales, que privilegian los textos cortos, el decir mucho con pocas palabras, pero la mayoría de los más de dos mil quinientos que se incluyen en esta antología, dedicada a los aforistas españoles de siglo XXI, procede de algún libro.
            Cerca de cien autores, con centenar y medio de volúmenes dedicados íntegramente al aforismo, es una cosecha que nunca antes se dio en la literatura española, ni quizá en ninguna otra literatura.
            El aforismo, tradicionalmente considerado como compendio de una larga experiencia vital, ahora parece asociarse peligrosamente a la simple ocurrencia, al juego de palabras, al darle la vuelta, a veces muy mecánicamente, a una frase hecha.
            Hacer un aforismo, o un haiku, parece estar al alcance de cualquiera. Y ya se sabe que quien hace un aforismo, o un haiku, hace un ciento.
            Verdad y media es, en intención de su autor, León Molina, una antología de aforismos, no de aforistas, y por eso los nombres bien conocidos se entremezclan con otros que sonarán por primera vez para la mayoría de los lectores. Y lo más curioso es que aciertos y desaciertos se reparten a partes iguales.
            Desaciertos: “Todas las mujeres son traductoras”. Si usted lo dice…
            “Algunos críticos tienen miedo a la página en blando”. Un trivial juego de palabras con “el miedo a la página en blanco”. La paronomasia también resulta muy socorrida: “Ningún aforista está aforado”-
            “El arte tiene que trascender lo individual, tocar el arquetipo”. Una obviedad.
            “Se aprende a soñar en la manera que tiene el viento de agitar lo real”. ¿Seguro? Más bien parece mera palabrería pseudopoética.
            “La verdad descubre que la verdad recubre”. Otro juego de palabras, una de las recetas más mecánicamente utilizadas para crear aforismos: “La fe mueve guadañas” escribe León Molina, el antólogo, que no duda en incluirse en la selección.
            Los antecedentes resultan inevitables. Las buenas ideas, o las frases ingeniosas, casi siempre se le ocurren a más de uno. “Al séptimo día, ¿Dios descansó o tiró la toalla?”, escribe Félix Trull. Antes había escrito Ángel González que Dios no descansó al séptimo día, “al séptimo día se cansó”.
            Parafraseando a uno de los autores incluidos habría que decir que “un buen aforismo está al alcance de cualquiera, salvo de la mayoría de quienes se dedican a escribir aforismos”.
            Pero son más lo aciertos en esta antología de aforismos, y apenas hay páginas en que no encontremos alguno memorable.
            “Desconfío de la idea que no cabe en una frase”, escribe Jorge Wagensberg, que ha sabido como nadie utilizar el aforismo para divulgar el pensamiento científico. Ramón Éder: “Guardar un secreto para siempre fortalece el carácter”. Y Javier Almuzara: “Hay un momento de la vida en que se deja de actuar con red; justo cuando toca el triple salto mortal”.
            Podríamos seguir citando: “Lo que te hace el tiempo no te lo hace ni tu peor enemigo” (Karmelo C. Iribarren); “Hasta del infierno se puede sentir nostalgia si lo atravesamos en buena compañía” (Victoria León); “Cada creador es una caja de resonancia donde retumba el eco de una tradición” (José Ángel Mañas).
            Ls géneros breves necesitan más que otros la colaboración del lector. Un aforismo, por muy rotundo que quiera parecer, necesita ser completado. Y a veces no estamos de humor para entender su humor (es lo que nos ocurre con la mayoría de los de Javier Sánchez Martín: “El aforismo es el quinto ingrediente de la pizza de cuatro estaciones” o “Llega el cambio climático por culpa de los aforismos”).
            Más que una antología, Verdad y media es un cajón de sastre donde el lector puede encontrar de todo: pretenciosas vaguedades, afirmaciones rotundas que nos hacen sonreír, lecciones de vida, sorprendentes paradojas y un puñado de verdades en las que no habíamos caído y que nos acompañarán ya para siempre.        
           


12 comentarios:

  1. En esa antología falto yo. ¿Será porque aún no he publicado?

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  2. Los citados son todos malísimos.

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    1. Es verdad que casi todos los citados son muy malos, el de Wagensberg incluido, puesto que es una tontería, dado que hay pocas ideas científicas complejas que quepan en una frase y ninguna de la física cuántica, por ejemplo. Para mí el único citable es el de Eder. Se ve que el antologizador tiene mal gusto lireratio y no es fiable, por lo que el libro debe de ser bastante prescindible. Para confirmar esa intuición deberías, Martín, decirnos si los que han cogido de ti son de los mejores que has publicado.

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  3. No lo entiendo, en el texto se habla de más de 2500 aforismos y en la foto del libro se ve que son 300, ¿en qué quedamos?

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  4. De hecho, yo desconfío de las ideas que SÍ caben en una frase (o eslogan, o pancarta). V. gr: "Make America great again".

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  5. "El verdadero talento, exige la desmesura"

    "Entre el aforismo y el silencio media, casi siempre, toda la escala completa de la inteligencia"

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  6. El libro "Verdad y media" se ha publicado en dos versiones: una, la que reseño, con más de 2500 aforismos, y la otra, que también aparece en la imagen, con solo 300.

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  7. El de "La fe mueve guadañas" alude obviamente a las guerras de religión. Pero eso lo sabe todo el mundo, y lo único ocurrente es el juego de palabras (guadañas por montañas), lo que quizá lo convierta en greguería pero no en aforismo.

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  8. Los de Javier Sánchez Martín suenan ridículos.
    Ni para la eslogan publicitario.

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  9. Da un poco de lástima intuir que con esta reseña te has ganado la antipatía no de uno, sino de varios autores: agárrate, Martín, que a más de uno le habrás inspirado algún aforismo, ja ja ja. Tu sinceridad como lector lo tiene más fácil cuando comentas libros de dinosaurios.

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  10. Creo que quienes hemos intervenido nos hemos excedido en resaltar lo negativo. El aforismo tiene también una función provocadora. Nietzsche dice "Toda convicción es una cárcel", y es claro que no totalmente, pero sí en parte. Sin convicciones es imposible vivir pero a la vez, paradójicamente, las convicciones nos reducen y limitan. En ese sentido la frase es una verdad parcial y por ello una provocación o espoleo mental. Eso es o puede ser también función del aforismo.

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  11. Da igual 300 que 2500. Da igual 121 que 349 libros de aforismos. Esta reseña-crítica vale para todos. Unos cuantos aprovechables y el resto repartidos en juegos de lenguajes, moralinas, psuedopoetización de lo vulgar, ocurrencias... eso sí todo dicho con buen tono. (Como cualquier libro de poemas). Veo que ni pasados por el harnero terminan separándose el grano de la granza. Yo siempre pico, suelo hojearlos en las librerías.
    Y tengo buenos amigos que los practican con fruición.

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